El Wanda Metropolitano abrirá una nueva página en la historia de nuestro club. Llegó el día D. La hora H, las 20:45, cuando empiece a rodar el esférico en nuestra nueva casa. 68.000 atléticos vivirán una noche mágica e inolvidable con el partido que enfrenta al Atlético de Madrid con el Málaga. Desde por la mañana, nuestra afición tiene una apretada agenda de actos para vivir un día especial hasta que comience el partido. Un 2 de octubre de 1966 se empezaba a jugar en el Calderón y, hoy, dos semanas antes de cumplirse 51 años de aquella fecha, estrenamos estadio.

Un estadio moderno, orgullo de la afición rojiblanca y que servirá para dar un salto cualitativo en el crecimiento del club. Será el primer partido de la temporada al calor del hogar. Cambia la casa, el escenario, pero nunca la fe y la pasión con la que nuestra afición se entrega a los colores rojiblancos en cada partido. Ya lo dijo Simeone en la previa, destacando que el “Wanda Metropolitano es impresionante” y espera “una olla a presión”. El papel de la afición será aún más importante en un recinto cerrado.

Regresa Griezmann a LaLiga tras la sanción de dos partidos, aunque ya jugó ante la Roma. Y es una de las novedades en la lista de 19 jugadores. El Málaga, por su parte, llega obligado a nuestro nuevo estadio porque aún no ha puntuado en LaLiga, siendo, junto con el Alavés, los dos equipos que figuran en el último lugar de la tabla, lo que hace al conjunto andaluz más peligroso.

Tras cerrar nuestra portería en los dos últimos partidos jugados (en Valencia y Roma), el equipo buscará regresar al gol en esta histórica cita en nuestro nuevo estadio.