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Atlético de Madrid Escudo Atlético de Madrid

UN GOL DE GAMEIRO DECIDIÓ ANTE EL COPENHAGUE EN EL WANDA METROPOLITANO

Segunda victoria y a octavos de final

Los nuestros cerraron la eliminatoria ante el Copenhague con otra victoria, ésta vez por 1-0 gracias al tempranero gol de Gameiro.

T. Calvo / FOTO: Á. Gutiérrez

El equipo salió muy concentrado al césped del Wanda Metropolitano, como si éste fuera el primer partido de la eliminatoria, presionando y dominando al Copenhague. Muy pronto, cuando transcurría el minuto 7, Gameiro recibió en la media luna del área y ajustó un disparo al palo derecho de la meta visitante. Era la primera alegría para la parroquia rojiblanca, que vio cómo después la renta pudo incrementarse con un remate de Torres que salvó el meta.

El Copenhague intentó acercarse a la meta de Oblak pero todos sus intentos acababan en el medio campo rojiblanco. Fernando Torres lo volvió a intentar a la media hora pero su testarazo se marchó fuera por poco.

Tras el descanso, el técnico danés hizo dos cambios para intentar dar mayor mordiente al ataque y Skov, uno de los que se incorporó, puso a prueba a Oblak por primera vez en el partido, pero su disparo lo despejó el meta esloveno. Un cabezazo de Godín estuvo a punto de ser el segundo gol en una falta lanzada por Gabi pero no encontró portería por poco. El que lo tuvo en sus botas fue Gameiro, pero Andersen respondió desviando a córner.

Hasta el final, control y dominio de los nuestros, aunque sin que se llegaran a convertir más goles. Este viernes conoceremos a nuestro rival en los octavos de final.

ATLÉTICO 1 – 0 COPENHAGUE

Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Sergi; Correa (Nico Gaitán, 60’), Koke (Saúl, 46’), Gabi, Vitolo; Gameiro (Thomas, 68’) y Fernando Torres.

Copenhague: Andersen; Ankersen, Vevro, Lüftner, Bengtsson; Thomsen, Gregus, Kvist (Skov, 46’), Fischer (Falk, 46’); Pavlovic y Sotiriou (Wind, 80’).

Árbitro: Gediminas Mazeika (Lituania).

EL GOL:
1-0. 7’. Gameiro
recibe en la frontal y ajusta un disparo a media altura con la zurda ante el que nada puede hacer Andersen.