S. Marcos: “Tengo tan cerca mi meta que trabajo el doble para alcanzarla”
“El Atlético de Madrid da muchas oportunidades a la cantera”
Canterano atlético desde los 9 años, Sergio Marcos González, ha dado un paso más esta temporada 2010-11 en su camino hacia el primer equipo. A sus 18 años, este centrocampista ofensivo que ya formó parte de la plantilla de B el curso pasado, se ha convertido en titular del filial entrenado por Antonio Rivas, que le define como un jugador “muy bien dotado técnicamente”, destacando que a pesar de su temprana edad ha logrado hacerse un hueco en el equipo.
Como buen técnico, Rivas no se conforma con lo que tiene, sino que espera algo más de todos sus jugadores. Sergio Marcos no es una excepción. A pesar de que asegura que es un jugador “muy interesante y en plena progresión”, el asturiano apunta ciertos aspectos como “tener más recorrido o ser más solvente a nivel defensivo en los que está poniendo mucho empeño en mejorar”. “Me gusta que mis centrocampistas tengan presencia en todo el campo”, señala Rivas.
Sabedor de lo quiere de él, a Marcos no le extrañan las palabras de su técnico. “El entrenador me pide que tenga llegada y que corra hacia atrás, no sólo quiere que los centrocampistas creemos juego, también que robemos balones”, apunta, y añade: “el entrenador es el que manda y si es lo que quiere todos vamos a trabajar en esa dirección”. En lo personal, Sergio tenía esta temporada marcada en rojo en su calendario ya que, tras una campaña pasada siendo suplente que le sirvió “para conocer la categoría”, tenía claro que esta debía ser la de su “explosión”, según sus palabras. Algo que está consiguiendo, pues Rivas le está dando responsabilidades que el canterano está aprovechando.
A pesar de los buenos deseos para este curso, el objetivo del Atlético B de entrar en puestos de play-off para optar a ascender está aún lejos, y el equipo está luchando por remontar el vuelo. “Empezamos la temporada con malos resultados y los buenos han tardado en llegar, pero ahora que no tenemos tantas lesiones en cuanto ganemos varios partidos seguro que podremos salir de ahí abajo. Somos una plantilla nueva, sólo unos pocos repetimos del año pasado. Al no conocer la categoría es normal que necesitemos un tiempo de adaptación como equipo”, razona.
Por esta razón, el centrocampista es consciente de que a día de hoy “las cosas han cambiado y los objetivos también, por eso ahora preferimos ir paso a paso, partido a partido. En verano esperábamos estar arriba y se ha torcido”. Aún así, Marcos no quiere ser pesimista y señala que “si nos recuperamos y salimos de ahí abajo no pensamos renunciar a nada, puede pasar cualquier cosa”.
Independientemente de los resultados, si hay algo de lo que el Club Atlético de Madrid puede estar satisfecho es de la proyección que está dando a sus canteranos. Un simple vistazo a cada una de las categorías del Fútbol Base colchonero basta para darse cuenta de que, en cada una de sus ligas, las plantillas del Atlético son las que tienen una media de edad inferior. Esto puede ser malo en ciertos aspectos, como el peaje que todos pasan al tener un desarrollo físico menor, pero que sin duda enriquece al Club de cara al futuro con unos chavales que llevan compitiendo al máximo desde la más temprana edad.
Así lo considera también Sergio Marcos, que lo ha vivido personalmente. “El Atlético tiene muchas cosas buenas, pero sobre todo destacaría la confianza que están dando a los jugadores jóvenes en cada una de las categorías. Nos dan muchas oportunidades y eso motiva mucho. Además el trato personal es muy bueno”, afirma. Esta filosofía de cantera ya está dando réditos al Atlético, no en vano jugadores como Domínguez o De Gea, no sólo han llegado al primer equipo, sino que se han asentado en el once titular. “Verles a ellos también nos motiva muchísimo porque todos vemos que se puede llegar, tenemos muy claro que si trabajamos bien nuestra oportunidad va a llegar”, apunta.
Pero no sólo de retos viven los canteranos colchoneros, también de ilusiones. Sergio Marcos vive con pasión cada entrenamiento porque ve cómo su gran sueño de alcanzar el primer equipo se acerca por momentos. “Es una sensación increíble. En cuanto llegué al B me dije a mí mismo: ‘Ya que he conseguido llegar hasta aquí, tengo que seguir trabajando e intentarlo’. Ahora que lo tengo tan cerca lucho y trabajo el doble por conseguir por mi meta porque el paso del B al primer equipo es el más difícil de todos”, admite el centrocampista.
A falta de unos pocos días para que el año 2010 eche el cierre. Sergio Marcos tiene claro qué desea para su equipo en 2011. “Por encima de todo quiero que sigamos trabajando igual o mejor y que tengamos más suerte de cara al gol, porque la verdad es que hasta ahora se nos ha resistido bastante. Estoy seguro de que eso va a cambiar muy pronto”, afirma.
En lo personal, resulta inevitable para el canterano pensar en alcanzar por fin su gran meta en este año que entra. “Lo ideal sería llegar cuanto antes al primer equipo, aunque sé que es difícil. Lo que me gustaría es hacer la pretemporada del próximo verano con ellos. Yo soy centrocampista ofensivo pero, si el entrenador me pide que sea defensa, ¡lo haré sin dudar! Pienso hacer lo que haga falta para cumplir mi sueño”, concluyó diciendo.
Como buen técnico, Rivas no se conforma con lo que tiene, sino que espera algo más de todos sus jugadores. Sergio Marcos no es una excepción. A pesar de que asegura que es un jugador “muy interesante y en plena progresión”, el asturiano apunta ciertos aspectos como “tener más recorrido o ser más solvente a nivel defensivo en los que está poniendo mucho empeño en mejorar”. “Me gusta que mis centrocampistas tengan presencia en todo el campo”, señala Rivas.
Sabedor de lo quiere de él, a Marcos no le extrañan las palabras de su técnico. “El entrenador me pide que tenga llegada y que corra hacia atrás, no sólo quiere que los centrocampistas creemos juego, también que robemos balones”, apunta, y añade: “el entrenador es el que manda y si es lo que quiere todos vamos a trabajar en esa dirección”. En lo personal, Sergio tenía esta temporada marcada en rojo en su calendario ya que, tras una campaña pasada siendo suplente que le sirvió “para conocer la categoría”, tenía claro que esta debía ser la de su “explosión”, según sus palabras. Algo que está consiguiendo, pues Rivas le está dando responsabilidades que el canterano está aprovechando.
A pesar de los buenos deseos para este curso, el objetivo del Atlético B de entrar en puestos de play-off para optar a ascender está aún lejos, y el equipo está luchando por remontar el vuelo. “Empezamos la temporada con malos resultados y los buenos han tardado en llegar, pero ahora que no tenemos tantas lesiones en cuanto ganemos varios partidos seguro que podremos salir de ahí abajo. Somos una plantilla nueva, sólo unos pocos repetimos del año pasado. Al no conocer la categoría es normal que necesitemos un tiempo de adaptación como equipo”, razona.
Por esta razón, el centrocampista es consciente de que a día de hoy “las cosas han cambiado y los objetivos también, por eso ahora preferimos ir paso a paso, partido a partido. En verano esperábamos estar arriba y se ha torcido”. Aún así, Marcos no quiere ser pesimista y señala que “si nos recuperamos y salimos de ahí abajo no pensamos renunciar a nada, puede pasar cualquier cosa”.
Independientemente de los resultados, si hay algo de lo que el Club Atlético de Madrid puede estar satisfecho es de la proyección que está dando a sus canteranos. Un simple vistazo a cada una de las categorías del Fútbol Base colchonero basta para darse cuenta de que, en cada una de sus ligas, las plantillas del Atlético son las que tienen una media de edad inferior. Esto puede ser malo en ciertos aspectos, como el peaje que todos pasan al tener un desarrollo físico menor, pero que sin duda enriquece al Club de cara al futuro con unos chavales que llevan compitiendo al máximo desde la más temprana edad.
Así lo considera también Sergio Marcos, que lo ha vivido personalmente. “El Atlético tiene muchas cosas buenas, pero sobre todo destacaría la confianza que están dando a los jugadores jóvenes en cada una de las categorías. Nos dan muchas oportunidades y eso motiva mucho. Además el trato personal es muy bueno”, afirma. Esta filosofía de cantera ya está dando réditos al Atlético, no en vano jugadores como Domínguez o De Gea, no sólo han llegado al primer equipo, sino que se han asentado en el once titular. “Verles a ellos también nos motiva muchísimo porque todos vemos que se puede llegar, tenemos muy claro que si trabajamos bien nuestra oportunidad va a llegar”, apunta.
Pero no sólo de retos viven los canteranos colchoneros, también de ilusiones. Sergio Marcos vive con pasión cada entrenamiento porque ve cómo su gran sueño de alcanzar el primer equipo se acerca por momentos. “Es una sensación increíble. En cuanto llegué al B me dije a mí mismo: ‘Ya que he conseguido llegar hasta aquí, tengo que seguir trabajando e intentarlo’. Ahora que lo tengo tan cerca lucho y trabajo el doble por conseguir por mi meta porque el paso del B al primer equipo es el más difícil de todos”, admite el centrocampista.
A falta de unos pocos días para que el año 2010 eche el cierre. Sergio Marcos tiene claro qué desea para su equipo en 2011. “Por encima de todo quiero que sigamos trabajando igual o mejor y que tengamos más suerte de cara al gol, porque la verdad es que hasta ahora se nos ha resistido bastante. Estoy seguro de que eso va a cambiar muy pronto”, afirma.
En lo personal, resulta inevitable para el canterano pensar en alcanzar por fin su gran meta en este año que entra. “Lo ideal sería llegar cuanto antes al primer equipo, aunque sé que es difícil. Lo que me gustaría es hacer la pretemporada del próximo verano con ellos. Yo soy centrocampista ofensivo pero, si el entrenador me pide que sea defensa, ¡lo haré sin dudar! Pienso hacer lo que haga falta para cumplir mi sueño”, concluyó diciendo.