Jan Oblak fue uno de los nombres propios del pase a cuartos en la Champions League. El esloveno, que saltó al terreno de juego tras la lesión de Moyá en el minuto 22, detuvo uno de los lanzamientos de penalti del Bayer Leverkusen.

“Yo no soy el gran protagonista. Los protagonistas somos todos que jugamos y merecimos el pase”, afirmó el arquero rojiblanco, que deseó la mejor de las suertes a su compañero de portería: “Es mala suerte pero que Moyá se recupere lo más rápido posible”.  Por último, Oblak añadió que “esto es el fútbol. En un minuto, en un día, en una hora todo cambia. No sabemos qué puede pasar mañana".