No será un partido más para Diego Roberto Godín Leal. El defensa uruguayo, de 27 años, cumplió su partido número 200 (91 con el Villareal y 109 con el Atlético) en la Primera División española con una victoria por 3-0 al Valladolid, que permite seguir coliderando la Liga al conjunto de Diego Pablo Simeone. El central rojiblanco celebró esta importante cita marcando el tercer gol rojiblanco con un gran remate de cabeza tras un saque de esquina.  De esta forma, el futbolista charrúa sigue haciendo historia en nuestra entidad erigiéndose, en cada partido, como uno de los líderes del equipo sobre el campo.

Diego Godín aterrizó en el fútbol español, de la mano del Villareal, en la temporada 2007/2008. En su primera temporada en el submarino amarillo, el central disputó 24 encuentros. Su progresión fue latente y es que, en la 2008/2009 sumó 31 partidos para terminar su periplo en Castellón en la campaña siguiente disputando 36 encuentros ligueros. En esta etapa de su carrera, el central convirtió 4 goles demostrando un enorme poderío aéreo, sobre todo, a balón parado.

Sus buenas actuaciones en el equipo castellonés, hicieron que la dirección deportiva del club se fijase en él. De esta manera, Godín recaló en la disciplina rojiblanca en la temporada 2010/2011, y desde entonces, el ‘Kaiser’ uruguayo ha sido imprescindible en la formación de una de las mejores defensas de Europa junto a Miranda. Godín disputó 25 choques en su primer año como colchonero y 27 en la segunda temporada. Su seguridad y fortaleza defensiva hicieron aumentar sus minutos y la temporada pasada completó un total de 35 encuentros. Este año, en el que el equipo se encuentra inmerso en la lucha por el liderato de la Liga, el central solo se ha perdido un compromiso, disputando 22 encuentros. Como rojiblanco ya suma cinco tantos en Liga. 

Tras seis temporadas en la Primera División española, Diego Godín se ha consagrado como uno de los centrales más seguros y eficaces del panorama mundial. Sus 200 partidos en la Liga más poderosa del mundo dan buena prueba de ello. La afición rojiblanca sabe que tiene un auténtico valladar en la zaga, un motivo de forzosa celebración. Por muchos partidos más con la rojiblanca, Diego. ¡Enhorabuena!