El Plaza de Argel supo jugar su partido y ganó a un Atlético Féminas que lo intentó por todos los medios pero que se encontró con los postes y con la meta rival cuando tuvo la oportunidad de hacer gol. El primer tiempo fue de claro dominio del Plaza de Argel, cuyas jugadoras salieron muy concentradas y con el objetivo de marcar antes que las rojiblancas. Sin embargo, se encontraron a una excelente Estefi, que detuvo cuatro balones in extremis, acompañada por un gran trabajo en defensa de María Cabezón. Sin embargo, las alicantinas consiguieron marcar en la primera mitad gracias a un gol precedido de una falta que el árbitro no vio o no quiso ver. A partir de ahí, el Atlético Féminas fue el que manejó más el balón aunque sin ocasiones demasiado claras en la primera mitad. En la segunda, un balón al palo de Mar Prieto avivó el partido, que estuvo del lado rojiblanco durante muchos minutos. Las visitantes, a la contra, crearon menos peligro que en la primera mitad, pero en una llegada pusieron el 0-2 en el marcador cuando las chicas de María Vargas estaban rondando el gol del empate. Y es que cuando no quiere entrar la bola no hay forma. Paloma, en los estertores del partido, envió un balón al travesaño y la meta visitante sacó una mano prodigiosa a un fenomenal disparo de Ñuffly desde la frontal. Ahora, el Plaza de Argel es líder con un punto de ventaja sobre las rojiblancas y con un partido menos, el que tienen que descansar las chicas de María Vargas. Las alicantinas tienen la ventaja de cara a ser campeonas pero hasta el final queda la esperanza de las rojiblancas por enderezar esta situación ganando todos los partidos que quedan y esperando el tropiezo del Plaza de Argel.