El Atlético suma y sigue en la Champions
El Atlético de Madrid sigue invicto en Champions. Un golazo de Adrián adelantó a los rojiblancos y un autogol de Alderweireld puso las tablas ante el Zenit.
ZENIT 1 – 1 ATLÉTICO DE MADRID
Zenit: Lodigin; Smolnikov, Hubocan, Lombaerts, Criscito; Witsel, Fayzulin (Bystrov, 63’); Hulk, Shirokov (Arshavin, 63’), Shatov; y Kerzhakov.
Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Alderweireld, Insua; Cristian Rodríguez (Óliver Torres, 79’), Gabi, Guilavogui, Koke; Raúl García y Adrián.
Árbitro: Martin Atkinson (Inglaterra). Mostró tarjeta amarilla a los locales ; y a los visitantes Juanfran (31’), Raúl García (84’).
Incidencias: Jornada 5 de la Fase de Grupos de la Champions League, Grupo G. Estadio Petrovsky de San Petersburgo. -6 grados a la hora del inicio del encuentro. El Atlético de Madrid cambió el habitual pantalón azul por uno rojo junto a la elástica rojiblanca y medias rojas.
GOLES:
0-1. 53’. Raúl García aguanta el balón para dar un pase al hueco a Adrián. El asturiano se va por velocidad y supera por bajo al portero con un tiro raso.
1-1. 79’. Centro de Smolnikov, toca en Alderweireld y Courtois no llega a despejar.
El Atlético de Madrid suma y sigue en la máxima competición continental. Con el primer puesto asegurado, los rojiblancos buscaron el pleno en el quinto partido de la Fase de Grupos y, de no haber sido por la mala suerte con un autogol de Alderweireld, habría conseguido su propósito con un partido serio y muy trabajado en defensa y bien jugado en ataque.
El Atlético de Madrid saltó al terreno de juego del Estadio Petrovsky con las ideas muy claras: lograr un triunfo para continuar con la racha en la máxima competición continental. Hasta este encuentro, los de Simeone habían logrado el pleno de triunfos, cuatro de cuatro, lo que había hecho posible jugar en el frío San Petersburgo con la tranquilidad de tener los deberes hechos. Con el pase a la siguiente ronda como primeros de grupo ya en el bolsillo, el Atlético jugó un partido inteligente, dejando la posesión a los rusos pero sin dejarles crear muchas ocasiones de peligro.
Así, todo el arsenal del Zenit se limitó a un disparo de Hulk en el minuto 14, al que respondió bien Courtois. Por el contrario, el conjunto rojiblanco, con un Cristian Rodríguez en el once con muchas ganas de poder dedicar un buen partido y un gol a su hija Lola, recién nacida antes de este desplazamiento a San Petersburgo. Y a punto estuvo de hacerlo el uruguayo en el minuto 28, con una pared con Raúl García en la que el meta ruso salió rápido y abortó la jugada antes de que la bota de Cristian pudiera dirigir a gol el remate.
Pero la ocasión más clara llegó a balón parado en el minuto 45. Gabi sacó una falta en el medio campo que culminó Koke con un zapatazo sesgado que tuvo que despejar como pudo el meta Lodigin. Fue la mejor oportunidad rojiblanca en la primera mitad y con la que se llegó al descanso.
El Zenit perdió su oportunidad en la primera mitad. Estaba claro que en el momento en el que el Atlético tuviera una ocasión de gol nítida podía asestar un golpe letal al conjunto ruso. El equipo de Spalletti avisó pronto por medio de Hulk nada más iniciarse el segundo acto, pero Courtois no estaba dispuesto a que perforaran su puerta. Koke volvió a avisar a Lodigin con un disparo lejano que detuvo el meta. Kerzhakov lo intentó pero Courtois atajó de nuevo. Fue el preludio del gol de Adrián.
Raúl García recibió en el medio campo, aguantó la posesión para que abriera el asturiano y le dio un pase en profundidad con el que se fue por velocidad de su marcador, se plantó ante el meta y le batió por bajo. Adrián volvió a marcar, por segundo partido consecutivo, ya lo hizo el sábado ante el Getafe, y dio muestras de ser de nuevo el jugador que espera la afición rojiblanca, aquél que deslumbró en la Europa League conquistada en 2012.
Un minuto después, Raúl García estuvo a punto de asestar el golpe definitivo al Zenit, con una vaselina que se estrelló en el travesaño. El Zenit decidió ‘quemar sus naves’ con un doble cambio, entrando Bystrov y Arshavin, para ver si tenía más opciones de empatar el encuentro. Y la fortuna se alió con los rusos, porque un centro de Smolnikov tocó en Alderweireld y Courtois no llegó a despejar. El gol llegó en la jugada menos peligrosa para los rojiblancos. Simeone decidió poco después dar entrada a Óliver Torres por Cristian Rodríguez y el extremeño dio un pase de gol a Raúl García que el navarro estuvo a punto de convertir pero Lodigin estuvo atento para salvar a su equipo y desviar a córner.
Empate a uno final que sirvió para continuar invictos en la Champions, con cuatro victorias y tablas en este encuentro y que habla muy bien de este Atlético de Madrid que, juegue quien juegue, da la cara y pelea por el triunfo hasta el final.