El Atlético B empató a cero con el Fuerteventura un partido en el que las ocasiones brillaron por su ausencia y en el que el dominio rojiblanco no se pudo traducir en un triunfo que habría aliviado la situación del equipo de Abraham García en la clasificación. El Atlético B tuvo un partido complicado ante uno de los equipos de la zona alta de la tabla, el Fuerteventura. No tuvo la intensidad y los goles de la pasada temporada, pero sí emoción. La imagen del filial rojiblanco ante el Real Madrid Castilla hizo que el rival tuviera muy en cuenta al Atlético B y buscó frenar las llegadas por banda de Didi y Cedric y el juego del trivote formado por Joshua, Álex Quillo y Koke. Así, el conjunto canario salió con una defensa de cinco jugadores, que parecía un muro infranqueable para los atacantes rojiblancos. Cuando se jugaba el primer minuto de juego, una internada de Cedric llevó el peligro a la meta de Novoa, pero fue un escarceo, porque realmente no hubo más jugadas de gol hasta pasada la media hora. Mientras, el único acercamiento con peligro de los verdiblancos se produjo en el minuto 9, cuando Suso se internó en el área pero su disparo lo repelió con acierto De Gea. Antes del descanso, Joshua tuvo dos opciones de gol, pero en la primera el meta visitante detuvo su disparo y en la segunda el balón se perdió por encima del travesaño. La segunda parte sólo tuvo un color, el rojiblanco, aunque no hubo ocasiones claras de gol. El Fuerteventura, un equipo que marcha en el quinto puesto de la tabla, decepcionó y mostró muy poca ambición, sin llegar con peligro a la meta de De Gea, quien fue un espectador más en el segundo acto. Por el contrario, un disparo lejano de Álex Quillo que se perdió rozando el travesaño fue la ocasión más clara de los rojiblancos, que pese al dominio no pudieron romper la férrea defensa canaria.