Comunicado oficial
El Atlético de Madrid condena rotundamente los cánticos inadmisibles que una minoría de aficionados realizó en el exterior del estadio antes de la celebración del derbi. El racismo es una de las mayores lacras de nuestra sociedad y desgraciadamente el mundo del fútbol y los clubes no estamos libres de su presencia. Nuestro club siempre se ha caracterizado por ser un espacio abierto e integrador de aficionados de diferentes nacionalidades, culturas, razas y clases sociales y unos pocos no pueden manchar la imagen de miles y miles de atléticos que apoyan a su equipo con pasión y con respeto al rival.
Estos cánticos nos provocan una enorme repulsa e indignación y no vamos a permitir que ningún individuo se escude en nuestros colores para proferir insultos de carácter racista o xenófobo. En el Atlético de Madrid tenemos tolerancia cero con el racismo, nuestro compromiso en la lucha contra esta lacra social es total y no nos detendremos hasta conseguir eliminarla. Para ello nos hemos puesto en contacto con las autoridades para ofrecerles nuestra máxima colaboración en la investigación de los hechos acaecidos en el exterior del estadio y reclamarles la identificación de las personas que participaron para poder proceder a la expulsión inmediata de aquellos que sean socios del club.
También queremos invitar a todos los profesionales relacionados con el mundo del fútbol a realizar una profunda reflexión. Dejando clara una vez más nuestra más enérgica condena de estos hechos, que no tienen la más mínima justificación, creemos que lo que ha sucedido en los días previos al derbi es inadmisible. A los aficionados se les pide cordura y racionalidad y, sin embargo, profesionales de diferentes ámbitos generaron durante la semana una campaña artificial encendiendo la mecha de la polémica sin medir la repercusión de sus acciones y manifestaciones.
El dolor que siente la familia rojiblanca por este suceso es enorme. No podemos permitir que alguien pueda relacionar a nuestra afición con este tipo de comportamientos y cuestionar nuestros valores por culpa de una minoría que no nos representa. Nuestra decisión es firme y rotunda y no nos detendremos hasta expulsarles de la familia rojiblanca porque no pueden formar parte de ella.